La tasa diaria de infecciones por COVID-19 en Sudáfrica podría triplicarse a más de 10.000 para fines de esta semana, ya que la nueva variante ómicron se está propagando con rapidez, dijo el lunes un importante experto en enfermedades infecciosas.
El profesor Salim Abdool Karim, asesor principal del gobierno durante la respuesta inicial a la pandemia, afirmó igualmente que, si bien las vacunas existentes deberían ser efectivas para prevenir la enfermedad grave de la variante, los hospitales sudafricanos podrían estar bajo la presión de una avalancha de ingresos dentro de dos a tres semanas.
«Incluso si ómicron no es clínicamente peor, y ciertamente las anécdotas no levantan ninguna señal de alerta todavía (…), vamos a ver esto (la presión sobre los hospitales) con toda probabilidad debido a la rapidez de la transmisión», comentó en una conferencia de prensa.
El descubrimiento de la variante en el sur de África causó alarma mundial, y varios países están limitando los viajes desde la región e imponiendo otras restricciones por temor a una rápida propagación incluso en poblaciones vacunadas.
La Organización Mundial de la Salud dijo el lunes que la variante presenta un riesgo global muy alto de aumentos repentinos de infecciones, aunque se necesitan más investigaciones para evaluar su potencial para evadir la protección contra la inmunidad inducida por vacunas e infecciones previas.
Abdool Karim, profesor de la sudafricana Universidad de KwaZulu-Natal y de la Universidad de Columbia en Estados Unidos, dijo que es probable que las vacunas confieran una buena protección contra ómicron debido a la inmunidad de las células T, diferente de la de los anticuerpos, que a menudo bloquea las infecciones.
«Incluso si hay algún escape de los anticuerpos, es muy difícil escapar de la inmunidad de las células T«, señaló.
Los médicos que han tratado a pacientes sudafricanos con COVID-19 dicen que, hasta ahora, ómicron parece estar produciendo síntomas leves, como tos seca, fiebre y sudores nocturnos. Pero los expertos en salud pública creen que es demasiado pronto para sacar conclusiones firmes.
El gobierno está haciendo todo lo posible para preparar sus instalaciones sanitarias para hacer frente a la variante, dijo el ministro de Salud, Joe Phaahla, en la misma conferencia de prensa.
Hasta ahora no ha habido un aumento pronunciado en las admisiones hospitalarias o en las muertes por COVID-19 desde que la variante se detectó por primera vez en Sudáfrica la semana pasada, en muestras de principios de noviembre.