En respuesta a los rápidos cambios en el clima, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha presentado un nuevo Marco operacional para el desarrollo de sistemas de salud resilientes al clima y con bajas emisiones de carbono. Publicado en vísperas de la próxima conferencia de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CP28), este marco integral está concebido para mejorar la resiliencia de los sistemas de salud y, al mismo tiempo, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a fin de ayudar a proteger la salud de las comunidades de todo el mundo.
«En todo el mundo, los sistemas de salud son vulnerables a los efectos del cambio climático, pero también contribuyen a él», declaró el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS. «Por lo tanto, tenemos una doble responsabilidad: forjar unos sistemas de salud que puedan soportar las crisis relacionadas con el clima y, al mismo tiempo, reducir su huella de carbono. Este marco ofrece a los países una hoja de ruta para hacer precisamente eso».
A medida que aumentan las temperaturas en todo el mundo y los fenómenos meteorológicos extremos se vuelven cada vez más frecuentes, la necesidad de contar con unos sistemas de salud resilientes al clima cobra más importancia que nunca. El Marco de la OMS ofrece una senda visionaria para abordar este desafío, y tiene como misión principal proteger y mejorar la salud de las poblaciones frente a un clima inestable y cambiante.
Además, hace hincapié en la optimización del uso de los recursos y la aplicación de estrategias para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, sin dejar de dar prioridad a la resiliencia ante el clima. Este Marco ofrece al sector de la salud la oportunidad de predicar con el ejemplo reduciendo sus propias emisiones de gases de efecto invernadero —que representan cerca del 5% del total mundial—, sin dejar de mejorar la calidad de la atención.
El Marco presenta diferentes vías para que los sistemas de salud fortalezcan su resiliencia ante el clima y se descarbonicen en función de su desempeño general, los niveles de emisiones de gases de efecto invernadero y la capacidad en materia de cambio climático y salud. Esto abarca a los sistemas de los países de ingreso bajo que deben aumentar su acceso a la energía y la prestación de servicios de salud a fin de proporcionar cobertura sanitaria universal. Desarrollar unos sistemas de salud resilientes al clima y con bajas emisiones de carbono contribuye al compromiso de la OMS de ofrecer unos servicios de salud seguros y de calidad, al tiempo que ayuda a combatir las causas profundas del cambio climático.
Los objetivos principales del marco de la OMS son:
- orientar a los profesionales del sector de la salud para que, a través de la colaboración, aborden los riesgos para la salud relacionados con el clima;
- fortalecer las funciones de los sistemas de salud relacionadas con la resiliencia ante el clima y los enfoques de salud con bajas emisiones de carbono;
- apoyar el desarrollo de intervenciones específicas para la reducción del riesgo climático y la reducción de las emisiones, y
- definir las funciones y las responsabilidades de los responsables de la toma de decisiones en materia de salud en lo que respecta a la resiliencia ante el clima.
Los beneficios de implementar este Marco van mucho más allá del ámbito de la atención de la salud. Al reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mejorar la resiliencia de los sistemas de salud, estamos contribuyendo a los objetivos más amplios de la cobertura sanitaria universal (CSU), la seguridad sanitaria a escala mundial y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas.
El Marco se elaboró a raíz de la solicitud de apoyo por parte de la OMS para crear unos sistemas de salud sostenibles resilientes al clima y con bajas emisiones de carbono, presentada por los ministros de Salud de más de 75 países. Estos países ingresaron en la Alianza para la Acción Transformadora sobre Clima y Salud (ATACH) durante la presidencia del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte de la 26.ª Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CP26 de la CMNUCC), celebrada en noviembre de 2021. Posteriormente, el Reino Unido y la OMS establecieron la ATACH de manera oficial en junio de 2022 para impulsar este ambicioso programa.
Este exhaustivo documento no es solo una hoja de ruta para las organizaciones y las autoridades en materia de salud, sino también un valioso recurso para los responsables de la toma de decisiones de sectores determinantes para la salud. Los organismos de salud pública, los responsables de la formulación de políticas y las instituciones especializadas pueden beneficiarse de las ideas y las estrategias que se describen en este Marco.
El Marco operacional de la OMS para el desarrollo de sistemas de salud resilientes al clima y con bajas emisiones de carbono forma parte de un plan para un sector de la salud sostenible y capaz de resistir el paso del tiempo. Presenta un camino a seguir claro para que los sistemas de salud protejan a las comunidades en un contexto marcado por los cambios climáticos constantes, reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero y contribuyan al logro de los objetivos en materia de salud mundial.
En la CP28, que también incluirá un día específicamente dedicado a la salud, esta histórica ocasión pondrá de relieve la importancia de incorporar las prioridades de salud pública a las discusiones sobre el clima.