Cuidar la salud puede ser un asunto complejo, sin embargo, puede aumentar la esperanza de vida. Y, por fortuna, hay una serie de consejos y hábitos que pueden ayudarte a mantenerte en forma. De hecho, en un estudio sobre riesgos cardiovasculares (realizado en 6,500 adultos), la Asociación Americana del Corazón destaca que una buena salud cardiovascular puede reducir las enfermedades relacionadas con la edad.
Además, de acuerdo con el epidemiólogo Nour Makarem, el estudio reveló que “una mejor salud cardiovascular se asocia a un envejecimiento biológico más lento […]. También encontramos una asociación dosis-dependiente: cuanto mayor es el nivel de salud cardiovascular, más lento es el envejecimiento biológico”. Se trata de una excelente noticia que podría ayudarnos a mantenernos jóvenes durante más tiempo.
Pero el estudio va aún más lejos, pues anuncia que con cierta rutina se pueden ganar 6 años en la lucha antiedad, a diferencia de las personas que descuidan su salud y que aparentan más edad. Entonces, ¿cuáles son los consejos para aumentar la esperanza de vida? He aquí la respuesta.
1. Mantente activo
Según el estudio, los adultos deberían dedicar al menos 30 minutos a hacer deporte moderado o 75 minutos de deporte de alta intensidad durante la semana, mientras que los niños deben hacer una actividad física al menos una hora al día.
Pero, ¿cómo puedes ser más activo?
Para mejorar tu salud cardiovascular, es aconsejable fortalecer los músculos, lo que puede implicar fortalecerlos al menos dos veces por semana cuando hagas deporte. También es buena idea evitar estar demasiado tiempo sentado y mantenerse en movimiento a lo largo del día. Por fortuna, los que pensaban que había que dar al menos 10,000 pasos al día deben saber que la cifra es inferior.
2. Dormir bien
Como siempre decimos, dormir es la clave de una buena salud. La OMS recomienda que los adultos duerman entre 7 y 9 horas por noche para mejorar su salud mental y física. Dormir lo suficiente favorece enormemente la cicatrización, mejora la función cerebral y reduce el riesgo de enfermedades crónicas.
¿Cómo puedes dormir mejor?
Dormir delante de la tele es muy malo para el descanso, y aún peor si cargas el celular durante la noche. Los teléfonos deberían estar prohibidos cuando te acuestas, ya que su luz azul altera tu reloj biológico y reduce la producción de melatonina, la hormona del sueño. Si sigues teniendo problemas para dormir, el ejército estadounidense ha desarrollado una técnica que permite conciliar el sueño en únicamente dos minutos.
3. Come mejor
La alimentación desempeña un papel esencial en la buena salud. Comer menos sal, así como más fruta y verdura te ayudará a mantener el colesterol bajo control y a limitar el riesgo de accidentes cardiovasculares.
¿Cómo comer mejor?
Comer bien puede parecer complicado y difícil, pero no es imposible. Basta con limitar las bebidas azucaradas y refrescos, al igual que la carne roja. Si te resulta difícil prescindir de la carne, le recomendamos comer pescado o filetes de pollo sin piel. Por último, evita todos los ácidos grasos saturados de los productos lácteos (mantequilla, queso, leche entera) y los ácidos grasos trans del aceite de soja y de las carnes como el cordero y la res.
4. Controla tu peso
Aprender a gestionar el equilibrio entre tu peso y tu alimentación tiene muchas ventajas, aunque solo sea para evitar desequilibrios alimentarios que pueden ser un peligro para tu salud, como el riesgo de diabetes, obesidad o hipertensión. El IMC (índice de masa corporal) es la mejor forma de conocer tu peso. Aunque es posible calcularlo en línea, te aconsejamos encarecidamente que consultes a un médico para obtener mayor precisión. Según la OMS, el IMC debe situarse entre 18.5 y 24.9.
¿Cómo controlar el peso?
El primer paso es controlar tus porciones de comida. Tienes que aprender cuánto pones en tu plato. Si estás empezando una dieta, reduce gradualmente la ingesta de alimentos, dando prioridad a la fruta, la verdura y los cereales integrales. El siguiente paso sería moverte un poco más para quemar calorías y mejorar tu salud física y mental. Por último, si no consigues controlar tu peso, no dudes en consultar a un profesional de la salud, que te aconsejará sobre el mejor programa a seguir en función de tu personalidad, talla y complexión.